Libros (El papel principal)
El tópico dice que unos, los Beatles, eran niños bien, burgueses y
conservadores; y que los otros, los Rolling Stones, eran unos rebeldes
desenfrenados con los que nadie dejaría salir a su hija. Eran los
eslóganes de una imagen bien diseñada, que los londinenses adoptaron en
contraposición a los de Liverpool: el pelo más largo, el sonido más
sucio, la pose más insolente. En realidad, los Beatles tenían orígenes
más humildes y en radicalismo político nadie ganaba a Lennon.
Eran rivales y eran muy amigos: los Beatles habían empezado antes, ayudaron a dar sus primeros pasos a los Stones —Jagger y Richards son tres años más jóvenes que Lennon y McCartney—, y les abrieron muchas puertas. Colaboraron a menudo: Lennon era el beatle más cercano a los Stones; Brian Jones fue el más beatle de los cinco stones. Compartieron fiestas, sustancias, canciones, viajes, celos, conflictos. Los Fab Four evolucionaron con mucha rapidez, quemando etapas, y se hicieron añicos en 1970; los Stones fueron fieles durante décadas a su estilo, anclado en el blues.
Eran rivales y eran muy amigos: los Beatles habían empezado antes, ayudaron a dar sus primeros pasos a los Stones —Jagger y Richards son tres años más jóvenes que Lennon y McCartney—, y les abrieron muchas puertas. Colaboraron a menudo: Lennon era el beatle más cercano a los Stones; Brian Jones fue el más beatle de los cinco stones. Compartieron fiestas, sustancias, canciones, viajes, celos, conflictos. Los Fab Four evolucionaron con mucha rapidez, quemando etapas, y se hicieron añicos en 1970; los Stones fueron fieles durante décadas a su estilo, anclado en el blues.
El libro BeatleStones. Un duelo, un vencedor (editorial
Milenio) trata de detallar las coincidencias y diferencias entre las
dos bandas fundamentales de la segunda mitad del siglo XX. Una obra
singular, pues sus autores son dos empresarios y melómanos franceses:
Yves Delmas es el presidente de Seur y Charles Gancel, músico y
novelista. Escribieron este libro de forma “perezosa”, a lo largo de 10
años, pasándose cada capítulo para que el otro lo completara.(Fuente: El País).
No hay comentarios:
Publicar un comentario