martes, 10 de noviembre de 2015

Noticias (Reseteando la actualidad) 

El veterano músico estadounidense Allen Toussaint ha muerto a los 77 años en Madrid tras actuar este lunes en el Teatro Lara.
El artista sufrió una parada cardíaca poco después de su concierto, cuando se encontraba de vuelta a su hotel en la capital.
Toussaint había actuado el domingo en Bilbao y esa misma noche en Madrid. Los músicos que lo acompañaban explicaron a los médicos que no habían notado nada extraño hasta ese momento y que aparentemente se encontraba bien de salud. 
Pianista, cantante y compositor, Toussaint fue autor y productor de hits popularizados por una enorme y variada cantidad de grandes artistas de la música popular como Otis Redding, Bo Diddley, Jerry Garcia, Rolling Stones, The Who, Paul McCartney & Wings, Ringo Starr, Willie DeVille, Elvis Costello, Dr. John, The Band y Little Feat.
Paseando su música por el barrio francés de Nueva Orleáns y dejándose caer por locales emblemáticos como el Tipitina o el House Of Blues, Allen Toussaint era uno de los ciudadanos más respetados y con más historia musical de la ciudad.
Aunque se trataba de un músico poco conocido por el gran público, fue una figura fundamental en el rhythm & blues de EEUU y sobre todo en el de su ciudad. Arcano de los sonidos carnosos y suaves de Nueva Orleáns, tuvo una enorme influencia en varias generaciones de músicos de la mayor urbe de la Louisiana. Fue, en ese sentido, un típico ejemplo de músico de músicos, copiado y seguido por cientos de artistas de su carismática ciudad.
En la última década, Toussaint alcanzó cierta notoriedad gracias al padrinazgo de Elvis Costello, que grabó junto a él el álbum The River in Reverse (2006).
Toussaint comenzó su carrera en 1955, a los 17 años de edad, influido por el estilo libertino y asalvajado de Professor Longhair y el rock & roll sureño de Fats Domino, entre otros. Era buen conocedor de las esencias del jazz, del blues, del gospel y del rhythm & blues y fue en ese terreno pantanoso donde se movió este pianista dotado de un swing sin igual.
Aunque su inmensa labor afectó definitivamente a la música de EEUU de los años 60 y 70, Toussaint no fue nunca una estrella. De hecho, grabó su primer disco en solitario en 1971, después de una década larga produciendo, arreglando, participando en las grabaciones de otros músicos o componiendo canciones, que en algunos casos alcanzaron el éxito comercial, como Mother-in-Law, Fortune Teller o Lipstick Traces (On a Cigarette).
Los tiempos fueron cambiando y Toussaint con ellos. Apareció el funk y allí estuvieron su piano y su sabiduría; surgió la música disco y tampoco faltó a su encuentro. Su actividad, que hasta ese momento había sido frenética, decayó en la década de los años 80, y fue muy discreta hasta su rehabilitación artística, a partir de 2005. (Fuente: Diario El Mundo).


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