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Discos (Del vinilo al CD)

Este es el extracto de una conversación que pudo cambiar el futuro de la música rock: "¡Hola Querida!. ¿A qué no sabes lo que me paso hoy?. Viste ese guitarrista que toca en las sesiones de todo el mundo, Jimmy Page?. Exacto, el de los Yardbirds. Bueno, vino a la sala de ensayo a decirme que está formando un nuevo grupo y quiere que sea el cantante. ¿Como que qué le contesté? Que no, por supuesto. ¡Justo ahora que tengo un contrato para ir de gira por los Estados Unidos...!. ¿Que decís? ¿Que si quedé mal? Nooooo. Zafé como un duque: le recomendé a un pibe rubio que canta muy bien. Incluso tiene una voz parecida a la mía. Un tal Robert Plant...".

Seguramente, en sus pesadillas, Terry Reid habrá revivido esa escena muchas veces en los años siguientes. La epopeya del rock está llena de artistas que sufrieron infortunios y frustraciones para llegar a su meta. Pero la historia de Terry Reid muestra la otra cara de la moneda. Un cantante a quien la fortuna golpeó a su puerta un lejano día de 1968 en el que le ofrecieron unirse al que -poco tiempo después- se convertiría en uno de los grupos más famosos del mundo. Esta es la historia del hombre que rechazó a Led Zeppelin.

La parte positiva de esta historia es que Terry Reid desarrolló una corta pero intensa carrera solista que tuvo sus mejores momentos a finales de la década de los 70 y que culminó con la publicación en 1973 de su obra maestra titulada River.
Este disco está estructurado, como muchos vinilos de la época, con dos caras bien diferenciadas: la cara A se reserva para cuatro temas que podemos denominar rockeros y entre los que destacan "Things to try" y "Love life", y en la cara B, de tono mas intimista, nos encontramos con tres auténticas joyas: "River", "Dream" y "Milestones", donde la guitarra y la percusión se mezclan con esa voz peculiar, única, que aulla, acaricia y sobre todo emociona, para recordarnos a un artista que con el paso del tiempo se convirtió en un músico de culto.

 

TERRY REID: RIVER